La gran mayoría de teléfonos móviles permite la creación de puntos de acceso WiFi para compartir la conexión con otros dispositivos. Sin embargo, a través de un ordenador además podemos compartir nuestra conexión a Internet, y en Windows 10 y 11 lo podemos hacer de forma muy simple.
El sistema operativo de Microsoft cuenta con una opción de serie para transformar nuestro ordenador en un punto de acceso WiFi y ofrecer conexión a otros dispositivos de forma muy fácil.