Un joven taiwanés se ha convertido en anuncio tras haber obtenido recuperar un relevante suma de dinero (700,000 NT$, equivalentes a unos 20,500 euros) que su padre había perdido previamente siendo víctima de una estafa online. Lo ingenioso del caso es que lo logró, estafando a los ciberestafadores originales tras hacerles creer que recibirían nuevas inversiones.