La inteligencia artificial generativa está revolucionando el funcionamiento y la comunicación dentro de las organizaciones, permitiendo el desarrollo de aplicaciones innovadoras que mejoran tanto la experiencia del cliente como la de los empleados. Estas soluciones van desde el procesamiento inteligente de documentos hasta la personalización de contenido de marketing, y están siendo cada vez más compuestas en el día a día de las empresas para optimizar procesos y servicios.
En este panorama, utilizan Amazon Web Services (AWS) con una estrategia de múltiples cuentas para centralizar su gobernanza y administración. Establecen «zonas de aterrizaje» que facilitan la creación segura de cuentas y la gestión automatizada de todos sus entornos operativos, mientras un equipo conocido como Centro de Excelencia en la Nube (CCoE) supervisa los permisos de acceso y establece políticas de gobernanza.
La entrada de la IA generativa ha llevado a estas organizaciones a planificar un modelo operativo que estructure su implementación. Este modelo abarca desde el diseño organizacional, procesos centrales, tecnologías y roles necesarios, hasta las estructuras de gobernanza y modelos financieros que guían las operaciones. Dependiendo de sus necesidades en cuanto a agilidad, control y gobernanza, las organizaciones pueden adoptar distintos patrones de modelo operativo: descentralizado, centralizado o federado.