En agosto de 2023, un vecino de
Ivins (Utah) escuchó que alguien llamaba frenéticamente al timbre de su casa. Al mirar por la cámara de seguridad, se encontró con un niño que pedía ayuda. Cuando finalmente abrió la puerta, descubrió algo peor: el pequeño tenía heridas en las muñecas y tobillos, parecía desnutrido y sediento.