Microsoft anuncia que condicionará un tercio del bonus que perciben sus catorce directivos mejor pagados al éxito que tengan mejorando la orientación a la ciberseguridad de la compañía.
Una noticia que sigue a una sesión en la que el
Congreso interrogó duramente al presidente de
Microsoft,
Brad Smith, sobre los planes del gigante del software para mejorar su seguridad, tras ataques muy intensos a cuentas de correo electrónico de funcionarios federales por culpa de una cascada de errores en los planteamientos de ciberseguridad de las herramientas de la compañía, algo que cuestiona claramente la idoneidad de la compañía como contratista dominante para el gobierno.
Además, el
Congreso manifestó preocupaciones sobre la creciente presencia de
Microsoft en China y sobre sus acuerdos de transferencia de tecnología con los Emiratos Árabes. El resultado de la sesión y sobre todo, el fortísimo cuestionamiento sobre la orientación de
Microsoft a la ciberseguridad ha puesto a la compañía en modo defensivo hasta el punto de afirmar que hará del desarrollo de la ciberseguridad su prioridad máxima, incluso poniéndola sobre el de la inteligencia artificial.
La gran duda es si basta con condicionar un tercio del importe de los bonus de los catorce directivos mejor pagados de la compañía a la ausencia de incidentes de seguridad para cambiar la cultura de una compañía.