Los océanos y mares albergan, según estimaciones utilizadas por el
Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS), más del 96,5% del agua de nuestro planeta. En contraste, la atmósfera contiene un modestísimo 0,001% de este total. Las nubes, la niebla y la humedad del aire mismo contiene algo menos de 13,000 kilómetros cúbicos que además representan el 0,04% del agua dulce del planeta.
Recolectando agua de la niebla. Un grupo de investigadores ha puesto a prueba con éxito un método para obtener agua de la niebla. El sistema fue capaz de recopilar entre 0,2 y 5 litros de agua por metro cuadrado y día.
Secarral. Para poner a prueba el método, el equipo responsable del análisis recurrió al municicpio de Alto Hospicio, ubicado en pleno desierto del
Atacama. Este desierto alberga algunas de las zonas más áridas del planeta, en las que las precipitaciones apenas llegan al milímetro anual.
La ciudad depende para su abastecimiento del agua contenida en acuíferos subterráneos, estos no han sido debidamente recargados en un periodo de entre 10,000 y 17,000 años. La ciudad se extiende rápidamente y fruto de ello alrededor de 10,000 de sus residentes viven en asentamientos informales, casi todos ellos desconectados del sistema de abastecimiento de aguas.