La búsqueda de empleo no permanentemente es simple y más cuando uno aspira a un puesto importante en una gran empresa, la cual probablemente perderá tu curriculum en un inmenso mar lleno de informes de otros candidatos. Es lo que le temía
Rosa, nombre ficticio de la protagonista de una historia contada originalmente por
El Periódico de España.
Conocedora de los mecanismos de algunas empresas para seleccionar candidatos,
Rosa optó por intentar 'hackearlos'. Para ello se ayudó en buena parte de la inteligencia artificial. Y ojo, no falseó su currículum, pero sí le añadió ciertos elementos con los que estaba segura de pasar los sofisticados filtros de las compañías.
Nuestra protagonista tiene 34 años de edad y trabajó en un importante empresa tecnológica en nuestro país, la cual no se cita en la fuente original. Tras un ERE que previsiblemente afectaría a otros tantos amigos, a
Rosa le tocó buscarse la vida.
En su búsqueda de empleo se topó no con que le ofreciesen malos sueldos, que no le gustasen los objetivos o que el encargado de realizarle la entrevista no estuviese a la altura. Es que ni siquiera lograba que le contactasen para una entrevista y no tardó demasiado en saber por qué. El motivo no era otro que los sistemas internos de las empresas para localizar candidatos.