Era el día de los enamorados, pero no había ningún romance en un lujoso hotel de
Weissenhaus,
Alemania. Allí se libraba la partida definitiva del primer torneo del
Grand Slam de de ajedrez freestyle. Y ninguno de los contrincantes se llamaba
Magnus Carlsen. Eso ya era llamativo volveremos al porqué más adelante pero no era ni mucho menos lo único sorprendente de esa partida.
Fabio
Caruana optó por hacer su primer movimiento. d4. No parecía nada especialmente novedoso, pero Vincent Keymer, su contrincante, no respondió inmediatamente. De hecho tardó 20 minutos en hacerlo, algo insólito en el ajedrez clásico. Los jugadores de alto nivel suelen realizar esos primeros movimientos en minutos, y lo hacen porque se los conocen de memoria. Apenas piensan en esos primeros lances.
Pero es que
Caruana y Keymer no estaban jugando una partida de ajedrez clásico. Estaban jugando una partida del llamado ajedrez 'freestyle' ('estilo libre'). En dicha modalidad las posiciones de las piezas de la fila trasera (torres, caballos, alfiles, dama y rey) se eligen de forma aleatoria, aunque deben cumplirse dos reglas. La primera, que los alfiles deben estar en casillas de distinto color. Y la segunda, así que el rey siempre debe estar entre las dos torres.
Vincent Keymer, ganador del primero de los torneos del Freestyle Chess
Grand Slam Tour de 2025. Fuente: Freestyle Chess
Grand Slam Tour 2025.