Este año,
Microsoft presentó una nueva funcionalidad impulsada por inteligencia artificial en su línea de Copilot+ PCs, que permite monitorear todas las tareas de los clientes en sus computadoras. Desde entonces, esta cualidad ha generado una considerable controversia, sobre todo después de que se descubrió que datos sensibles del sistema «Recall» se almacenaban en texto plano.
Paso algún tiempo, y aunque la polémica pareció apaciguarse, una reciente revelación ha reavivado el debate. Un medio alemán informó que
Recall podía ser deshabilitado desde el Panel de Control de Windows 11, sin necesidad de manipulaciones complicadas en el registro del sistema. Sin embargo,
Microsoft aclaró que esto se trataba de un error y que la opción sería removida en una próxima renovación.
La continuidad de esta funcionalidad sigue siendo incierta, especialmente fuera de Europa, donde regulaciones como el Acta de Mercados Digitales de la UE podrían obligar a
Microsoft a ofrecer opciones diferentes. Mientras tanto, Windows
Recall se lanzará en beta el siguiente mes, primero para los integrantes del programa Windows Insider y luego para usuarios de Copilot+ PCs.
Entre tanto, una buena noticia es que
Microsoft ha decidido que
Recall no será habilitado por defecto y los usuarios deberán optar por activarlo.