Marián
García, más conocida en las redes sociales como
Boticaria García, es una de las grandes divulgadoras españolas en la rama de la salud. En uno de sus libros arroja un poco de luz en el complicado mundo de la lectura de etiquetas. La industria alimentaria intenta desviar permanentemente nuestra atención para pensar que algo es más saludable. En la actualidad sabemos que el azúcar añadido no es saludable por lo que intentan hacernos creer siempre que los alimentos tienen cero o nada de azúcar. ¿Es así?
Boticaria
García habla siempre de las diferencias en base a la legislación, que aunque a veces no lo parezca, hay leyes que dictaminan lo que se puede poner y no en un etiquetado. El problema es que esas leyes tienen muchos recovecos que son aprovechado por los fabricantes.
La legislación indica que un alimento se puede declarar con bajo contenido en azúcares si el producto no contiene más de cinco gramos de azúcares por cada 100 gramos, en el caso de los sólidos, o 2,5 gramos de azúcares por cada 100 ml, en el caso de los líquidos.
Un producto puede etiquetarse como un alimento sin azúcares cuando no contiene más de 0,5 gramos de azúcares por cada 100 gramos o 100 ml. El problema de alimentos "sin azúcares" como unas magdalenas 0% azúcares es que utilizan edulcorantes en cantidades elevadas.
Una de las creencias erróneas es tratar a todos los azúcares por igual, cuando no tienen nada que ver.