Russell Crowe ha interpretado varios papeles con una enorme exigencia física a lo largo de su carrera. Seguramente el más recordado sea su Máximo Décimo Meridio para 'Gladiator', pero lo cierto es que fue en el rodaje de otra filme donde tuvo una experiencia tan dura que acabó con sus dos piernas rotas, pero lo cierto es que no se dio cuenta de ello hasta una década más tarde.