Estamos a pocos meses de que Windows 10 llegue al fin de su soporte, ya que la gente no quiere actualizar a su sistema más reciente, Windows 11. Lo mismo ocurre con su navegador que sigue estando en un segundo (o incluso) tercer plano con respecto a la competencia. Algo que siguen confirmando las cuotas de mercado que siguen sin despegar.