Steve Jobs no dudaba en despedir a quien hiciera falta. El cofundador de Apple era conocido por su implacable gestión del talento, llegando a despedir cinco veces a la misma empleada, o sugiriendo el despido de todos los directivos de Starbucks. Cuarenta años luego, la historia ha dado un giro de 180 grados que ni el visionario de Apple habría podido predecir.
Un reciente estudio de Intelligent.