La serie de Fallout en Prime Video tiene muchas cosas buenas. Una de ellas, quizás de las mejores, es que Amazon y Bethesda no se han cortado lo más mínimo en recrear la violencia del yermo. Los videojuegos llevan décadas enseñándonos que la vida postapocalíptica nuclear es dura y hemos visto auténticas barbaridades.
Cuerpos fusilados en paredones, torturas, mutilaciones e incluso cadáveres que murieron agarrando la garganta de su adversario.