Muchas veces es el físico lo que echa para atrás a los concursantes de 'First Dates' y otras son las revelaciones que surgen durante la cena. En el caso de David, no torció el gesto por la devoción de Rober por la
Pantoja o la virgen del
Rocío, sino por su aversión a las relaciones abiertas.
Roberto "Rober" tiene 56 años, trabaja como camarero y es fan de Isabel
Pantoja desde hace mucho tiempo: "Cuando estaba soltera y no se había casado con Paquirri. Fíjate si soy fan de la
Pantoja que la llevo tatuada". Le contó a Carlos Sobera que había adoptado un niño hace ya 26 años y fue hasta Ucrania a buscarlo.
David es ordenanza, tiene 45 años y vive en Langreo (Asturias): "Yo acabé de la hostelería en el psicólogo". Le explicó a Rober que había estado 14-15 años casado con un chico, pero terminaron dejándolo: "Soy muy poco convencional para todo".
"Me parece un pelín aburrido" fue la primera impresión de Rober, luego de intercambiar un par de palabras con él. Tampoco le terminó de convencer que le gustara tanto viajar: "Yo para viajar me lo pienso 350,000 veces. Hacer la maleta, coger el tren, irnos de vacaciones... a mí me cuesta". Él era más de quedarse en casa y David, no tanto.
El asturiano además tenía claro que no pensaba tener hijos y se sorprendió cuando Rober le reveló que no solo se había tatuado a la Pantoja: "Yo tengo mucha fe en la virgen del
Rocío, la llevo tatuada en el gemelo".